Decapado químico

Utilizamos dos procesos de decapado químico: el decapado alcalino y el decapado ácido.

Decapado alcalino a una temperatura de 80-100ºC.

Se utilizan máquinas cerradas con una cesta giratoria; mediante la aspersión de producto químico sobre las piezas situadas en la cesta se lleva a cabo la disolución de la pintura. El tiempo de ciclo es de una o dos horas dependiendo del tipo de pintura y de su espesor.

Utilizamos dos tipos de decapante:

• Uno para piezas de metales no férricos, como el aluminio, el magnesio, el cobre, etc., y piezas de hierro recubiertas de zinc en las cuales se quiera preservar el zincado/galvanizado. Para este tipo de decapado, utilizamos una cesta de 1500 mm de diámetro.
• Otro para piezas de hierro no recubiertas de zinc, o de acero inoxidable. Con este decapante, utilizamos una máquina con una cesta con un diámetro de 2000 mm.

El decapado químico es un proceso indicado para:

• Piezas de metales no férricos.
• Piezas delicadas que pueden sufrir deformación durante la pirólisis debido al calor.
• Utillajes de pintura susceptibles de deformarse con el calor o que contengan muelles.

Decapado ácido para la eliminación de óxido superficial.

Utilizamos una cuba de 2000×700 mm con ácido sulfúrico rebajado al 25%. Las piezas se decapan mediante inmersión en ácido y son posteriormente lavadas con agua y producto neutralizante.

En todos los casos, las piezas de hierro se le entregan al cliente recubiertas con una fina capa de aceite de protección para prevenir la oxidación.